abril 24, 2024

Al comercio “informal” en Toluca…

Al comercio “informal” en Toluca…

Por Toño García.

Una de las primeras actividades en el mundo para realizar el intercambio de bienes materiales es el comercio, mismo que en México, tenía como forma habitual de medición para darle valor al bien o producto lo que conocemos como la actividad del “trueque”, actividad común de intercambio material entre las diversas etnias y dueños originales de México para tener diversos productos de diversos orígenes, latitudes y climas.

Hoy en día en Toluca todavía solemos encontrar en los mercados “sobre ruedas” que se instalan en sus pueblos originarios productos que se niegan a morir consecuencia de la destrucción y contaminación que ha causado su urbe y sus fábricas, pescado, acociles, quiltoniles, berros, hongos y desde luego el maíz, el nopal, capulines, el pulque (contado y en peligro de extinción) se niegan a desaparecer del piso para su venta en las diferentes plazas de los pueblos originarios y personas que ofrecen sus productos; que hoy día son intercambiados por dinero.

Esta actividad ha creado potencias mundiales en el ámbito económico, del comercio surgió la clase social que conocemos como burguesía y también ha creado en su acaparamiento lo que conocemos como monopolio. Esta actividad noble, humana y trascendental que se ejerce en el valle de Toluca sigue sin regularse para bien del pueblo, de su gente como medio generador de riqueza.

En Toluca las autoridades auxiliares cobran una cuota simbólica por el uso de banquetas u espacios en centros cívicos a los llamados vendedores ambulantes, esto tiene como fin obtener recursos para realizar sus gestiones, impresiones, papelería, pasajes, insumos de delegaciones y subdelegaciones; no hay lucro como tal, simplemente al no considerarse una partida económica especifica del municipio para apoyo a estas autoridades auxiliares, se financian de esta manera (desconozco actualmente si existe una norma que contemple el apoyo económico a las autoridades auxiliares en Toluca), este bien y apoyo lo genera el comercio.

Es una realidad que los líderes son creados y solapados por la misma autoridad municipal o estatal, con el fin de recaudar su cooperación por el uso de espacios públicos para ejercer el comercio en vía pública, ya que el inspector o supervisor no está facultado para cobrar o recibir gratificación alguna por uso del espacio público, y por tanto echan mano de “lideres” para recaudar su cooperación, esto; genera un círculo vicioso donde no crece el vendedor, no hay voluntad de regular esta actividad en la calle, tampoco se crean las condiciones materiales para generar empleos formales, el municipio no recibe un impuesto formal para su distribución en el mismo y lo más grave de todo; “los tacos más sabrosos que te imagines no pueden competir contra MacDonals y con ello generar una cadena comercial que permita el desarrollo del producto nacional”.

Si hablamos de la venta de productos “chinos” o de “piratería” estamos obligados a preguntar ¿por qué aduana cruzan estos productos? estos breves ejemplos dan muestra de que no hay voluntad para convertir el comercio informal en detonante para terminar con el desempleo y contribuir a dejar de ser un país en vías de desarrollo; habiendo en el mercado consumidores con diferentes capacidades de compra y por consiguiente variedad y competitividad en el mercado, “conscientes de que no es el mismo sabor de unas papas fritas en cualquier changarro a unas papas fritas del supermercado industrializadas”.

Aunque usted no lo crea el exalcalde de Toluca, Fernando Zamora, intento censar y regular al comercio informal, incluso pagando su “permiso” al municipio (por llamarlo así, pues no existe como tal) atendiendo la estrategia presidencial, del entonces presidente Enrique Peña Nieto, con la creación de “Zonas Económicas” que tenían como fin reducir la brecha de pobreza y generar el consumo local sin dejar de atender la inversión extranjera, donde el comercio informal podría con su regulación ser un detonante de riqueza.

Hoy Juan Rodolfo Sánchez Gómez alcalde de Toluca, ha permitido la represión en contra de personas que ejercen el comercio de manera informal, con el pretexto de la pandemia por Coronavirus, ha olvidado que Toluca no es un país de primer mundo, donde sus alrededores reflejan pobreza extrema y se ven obligados a salir día con día para llevar el pan y la sal a su casa.

El alcalde de Toluca comete un error que le exhibe como insensible e ignorante en el desarrollo de los pueblos usando el comercio como medio para generar riqueza entre su gente; la falta de dialogo, la imposición por la fuerza de políticas que favorecen el desarrollo del comercio establecido, donde no todos tiene la misma capacidad económica para consumir sus productos, ha puesto al municipio de Toluca en el ámbito mediático nacional, pues ni el gobierno federal bajo ninguna circunstancia ha limitado garantía individual alguna pese a la pandemia del Covid19; en lo que parece un golpe directo a las personas que viven gracias al comercio “informal” en Toluca…

 

         

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